Hace poco se me pidió apoyar al Albergue Wasi Wau tomándole fotos a un grupo de perros que habían sido rescatados recientemente. Capturar su mejor cara era el principal reto pues una buena foto gana vitrina y a mayor vitrina, más posibilidades de encontrar adoptantes.

Hubiera sido muy fácil para los encargados hacerle una foto con sus teléfonos celulares a cada uno de los 100 perros que hay actualmente en el albergue, pero el resultado no siempre es el mismo. Todo entra por los ojos, así que una sesión profesional suele funcionar mejor.

Fue en una de estas sesiones con los perros de Wasi Wau que conocí a Chaparrón, un perro que antes de ser rescatado, vivía con su novia preñada en uno de los óvalos de Cieneguilla, hasta que un día ella fue atropellada y murió.

Durante la sesión de fotos, Chaparrón se portó como si supiera que tenía que proyectar su mejor ‘yo’. Finalmente sus fotos salieron publicadas en redes y en páginas de grupos que promueven la adopción como Wasi Wau, la asociación WUF y Matchcota. Poco tiempo después fue adoptado.

Es importante tomar ciertas precauciones cuando retratas animales a distancias tan cortas. Los encargados del albergue deben estar presentes y asegurarse de que los candidatos sean dóciles, amigables y que hayan salido a hacer sus necesidades antes de empezar la sesión. Lo último que quieres es pila y caca en tus equipos.

Algo más: siempre ten paños húmedos o toallas para limpiar sus patas, sobretodo si los retratas sobre un sin fin de color claro.

Una perrita que tuvo la mejor actitud durante la sesión es Bella. Esta cachorra fue rescatada luego de ser atropellada en Comas con apenas 2 meses de edad. Fue trasladada al albergue, fue operada y fue dada en adopción, pero 11 meses después fue devuelta. Hoy sigue esperando un hogar.

Muchas personas prefieren adoptar perros chicos. Taquito es un buen ejemplo. El fue rescatado de un albergue que cerró luego de que el anterior dueño fuera diagnosticado con esquizofrenia. Actualmente Taquito está en proceso de adopción.

La paciencia es otro factor importante cuando trabajamos con perros, sobretodo con aquellos con pasados desconocidos que pueden generar reacciones inesperadas. Están los perros que posan como modelos profesionales, pero también están los que buscan el microsegundo para huir.

Estar siempre atentos y preparados es básico. Mide bien tu luz antes de empezar, asegura que no hayan cables sueltos que puedan provocar accidentes y asegúrate de que los perros estén limpios y bien cepillados, te ahorrará tiempo en post producción.